Así será el pasaporte del futuro: con tecnología biométrica

El pasaporte tal y como lo conocemos hoy en día con formato de libro y sellos por cada país que pisas podría desaparecer pronto. Australia está trabajando en un sistema de reconocimiento biométrico en los aeropuertos que reemplazará al pasaporte convencional antes de 2020, según publica ‘The Sidney Morning Herald’.

Esta tecnología constará de un sistema de puertas que, a diferencia de las SmartGates, que leen de forma automática los pasaportes, los pasajeros serán identificados por lasvariables biométricas de la cara, iris y/o huellas dactilares. Este sistema permitirá también realizar todo el proceso sin apenas intervención humana.

El aeropuerto de Canberra, pionero

El Departamento de Inmigración y Protección de Fronteras de Australia quiere empezar a probar esta tecnología en julio de 2017 en el aeropuerto de Canberra, que tiene vuelos a Singapur y Wellington. A continuación, este pasaporte biométrico se introducirá en otros aeropuertos mayores como Sydney o Melbourne en noviembre. El sistema se completará en 2019.

Este sistema es posible, eso sí, gracias a una inversión de 94 millones de dólares e implica el archivo de una gran base datos de pasajeros.

Un pasaporte muy seguro pero ¿privado?

Los sistemas biométricos funcionan a través de un formato simple que capta la huella digital para acceder a cierta información como son imágenes fotográficas, DNI, o nacionalidad. Estos datos también se pueden obtener a través del iris, y el rostro.

Según los expertos, se trata de un sistema de identificación muy seguro, puesto que cada humano tiene unos marcadores biométricos únicos. Sin embargo, este sistema cuenta con algunos aspectos controvertidos como el hecho del control de la privacidad, puesto que los datos se almacenan en la nube. Pero lo que sí será muy difícil es el hecho de intentar falsificar el pasaporte porque no se pueden falsificar las huellas dactilares.

Frente a un posible riesgo de hackeo de datos, corresponderá a cada Estado garantizar la seguridad de la información y que la base de datos biométrica coincida finalmente con la persona adecuada. Australia será el primer país en poner en práctica este pasaporte. ¿Será el fin definitivo del papel?

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Fuente: mediatrends


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